¿Sabías que puedes ahorrar mucha energía ahorrando agua? Concretamente, agua caliente, porque hay que calentarla con, por ejemplo, electricidad.
Por eso, los llamados «reguladores de caudal» son una gran medida de ahorro energético: cada vez que te lavas las manos o limpias las verduras puedes ahorrar agua sustituyendo el regulador de chorro del lavabo o de la cocina por un regulador de caudal con la última tecnología de ahorro de agua.
Aquí encontrarás una calculadora de ahorro de agua que calcula el potencial de ahorro de agua de tu hogar si instalas reguladores de caudal modernos.
Ahorrar agua en la ducha
El mayor potencial de ahorro energético: la ducha. Los ahorradores de agua modernos son fáciles de instalar y se adaptan a cualquier conexión de tubo flexible de ½ pulgada. Es especialmente importante saber que se consume mucha agua caliente, sobre todo al ducharse, por lo que aquí el potencial de ahorro energético es mayor.
Ahorrar agua en el lavabo
Ya debería estar claro que no hay que dejar abierto el grifo al cepillarse los dientes o afeitarse. Sin embargo, con los modernos reguladores de caudal en el grifo se puede ahorrar un poco más. La instalación también es sencilla en este caso, y se logra ahorrar con un caudal más que suficiente de cuatro a cinco litros por minuto.
Ahorrar agua en la cocina
Ya sea al lavar verdura, fregar una olla o limpiar una esponja, los reguladores de caudal modernos también permiten suministrar en la cocina la cantidad óptima de agua para evitar desperdiciarla. Aquí se recomienda un caudal de siete litros por minuto: suficiente para las tareas típicas de la cocina.